“La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como los son unas pocas palabras bondadosas.” S. Freud
Las palabras tiene un impacto crucial en nuestra salud física, mental y emocional. Es fundamental que podamos expresar lo que sentimos, ponerlo en palabras, hablar de ello, compartirlo.
Cuando mantenemos nuestros sentimientos guardados, reprimidos y encapsulados, nos aferramos a ese sufrimiento. En cambio, si logramos expresar nuestras emociones a través de las palabras, podemos procesarlas y transformarlas. Esto nos permite comprender mejor por qué nos sentimos así y encontrar soluciones para superar esas situaciones.
La bondad de la palabra en las emociones
Es muy importante poder expresar nuestras emociones con palabras para tener una vida más saludable. Cuando compartimos lo que sentimos, podemos procesarlo y sentirnos mejor. Guardar nuestras emociones puede afectarnos negativamente.
Hablar sobre lo que sentimos nos ayuda a comprender mejor nuestras emociones y encontrar soluciones. Cuando mantenemos nuestros sentimientos dentro de nosotros, pueden afectar nuestra vida diaria y nuestro cuerpo, generando síntomas como estrés, dolores de cabeza y problemas para dormir.
Emociones y aprendizaje
El proceso de aprendizaje no solo afecta a los niños y adolescentes en la escuela, también nos acompaña en la vida adulta. Nuestras emociones juegan un papel fundamental en cómo aprendemos y nos desempeñamos académicamente.
Si no expresamos nuestras emociones, nuestra capacidad para adquirir conocimientos y concentrarnos se ve afectada. También puede ser más difícil enfrentar situaciones de evaluación o exámenes. Por eso, es esencial hablar sobre lo que sentimos para mejorar nuestro desempeño académico.

Emociones y cuerpo
Nuestro cuerpo y mente están estrechamente conectados. Si no expresamos nuestras emociones, nuestro cuerpo puede responder de maneras negativas. Podemos experimentar palpitaciones, presión alta, dolores y cambios en nuestro peso.
El estrés y las emociones no expresadas pueden debilitar nuestro sistema inmunológico, haciéndonos más propensos a enfermarnos. Por eso, es importante hablar sobre lo que sentimos y encontrar formas saludables de manejar nuestras emociones.
El decir como solución
Expresar nuestras emociones con palabras es una solución efectiva para evitar que se manifiesten de manera negativa en nuestra vida. Cuando no hablamos sobre lo que sentimos, nuestras emociones pueden afectar diferentes áreas de nuestra vida cotidiana.
El silencio puede expresarse a través de síntomas como agresividad, ira, estrés, angustia, dolores físicos o dificultades para dormir. En cambio, si hablamos sobre lo que nos pasa, podemos prevenir estos problemas y llevar una vida más saludable.
Recuerda que hablar sobre tus emociones te ayuda a comprenderlas y a sentirte mejor. No tengas miedo de compartir lo que sientes con alguien en quien confíes.
Lic. Naselli Antonela